Pedacitos
'Y entonces me descubrí mirándome. Allí estaba yo justo en frente del espejo donde siempre te imaginaba. Tus formas tenían el sentido perfecto, el compás lo marcaba el aire que pasaba por la ventana y hacía mover las cortinas. Como parte de un plan astutamente preparado, te imaginaba siempre con la cantidad justa de luz, la suficiente como para que yo, cual directora de fotografía, pudiese componer el resto. Me descubrí mirándome y puse el empeño suficiente para descubrirme al detalle. Durante unos minutos centré toda mi atención en mis ojos, pequeños y de tonos marrones, y fue entonces cuando por primera vez te descubrí en mí. Allí estabas tú, en cada movimiento y en cada parpadeo. Sorprendida, decidí continuar con la 'auto-exploración' y en cada uno de los pasajes de mi cuerpo pude descubrirte, en algunos más escondido que en otros, pero en casi todos estabas presente. ¿Por qué estaba sucediendo? ¿Por qué tú y yo prácticamente formábamos un sólo elemento en mí?