Carta a un amigo
11 de Marzo de 2013 Queridísimo Wanso, auténtico y querido amigo. Como ya sabes, desde hace unos meses asisto a un taller de Escritura Narrativa al que decidí matricularme con un objetivo claro. Pues bien, te escribo para comentarte todos los logros que estoy consiguiendo y todas las experiencias literarias que estoy aprendiendo. Para ser sincera, debo confesarte que en algunas ocasiones me cuesta un poco obedecer a la profesora que imparte el taller, pues ya me conoces y sabes que la inspiración para escribir me llega en los momentos más inoportunos y desaparece cuando alguien me pide o sugiere que escriba algo, aunque me han comentado (cosa que me tranquiliza) que ese bloqueo acaba desapareciendo o disminuyendo con la práctica, de tal forma que yo no dejo de intentarlo. Igualmente, a veces, mantengo mi espíritu rebelde que tanto me caracteriza: hacer lo que debo cuando no corresponde y lo que no debo cuando corresponde. Volviendo a todo lo aprendido en este -breve-