El universo es azul
Normalmente me quedo desafiante mirando el inmenso universo azul que se esconde tras sus ojos y siento que no quiero más tonos en la gama de colores de mi vida. En realidad siempre lo he sabido, siempre he querido que fuese él, con su azul, quien pintase mis días, subrayara mis alegrías y mezclase su azul con el gris de mis fracasos y tristezas. Quiero ese azul, quiero sus ojos mirándome siempre, las cosquillas en mi barriga. Deseo un futuro azul chicle, una vida a su lado sin cansarme jamás de este bendito color que un día me enseñó y en torno al que ahora ya veo casi todas las cosas.