Noche de cervezas, tinto y bebidas varias.

De vuelta a casa. Hay quien camina despacio para disfrutar de un agradable paseo a media noche y algunos otros llevamos un paso más acelerado, quizá por las ganas de llegar. Ha sido un día muy largo.
Por fin en el Octavo. Mesa de lunarillos verdes y sillones rojos que invitan a la reflexión filosófica de la vida tras comentar tonterías varias. 
-¿Tú que crees? 
- Yo pienso que todo en esta vida pasa por algo, pasa porque tiene que pasar.
-¿En el destino?
-Sí, bueno, a eso es a lo que llamo yo destino.

Esta vez la coca-cola, light, nos ha jugado una mala pasada. No le deja lugar al sueño. Sigamos con las tonterías entonces. 
Un poco de GH en la terraza, un cigarro por aquí, una canción del recuerdo por allá. 
Ruta de habitaciones, risas flojas y tontas.
Y es que esta noche aquí no se duerme.


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