Una tarde tranquila.
Capaz de inventar cualquier historia para eludir la obligación. Para aquellas personas que me esperaban, hoy me he quedado en casa para recibir al planeta Marte, había quedado con él, le iba a preparar un café e íbamos a discutir si yo sería una buena "marciana". Quizá ya no me apetezca ser terrícola, quién sabe. Pero como de costumbre, no ha venido. Me quedé esperando, mientras otras personas me esperaban a mi. Curioso.
Hoy no tenía ganas, preferí quedarme en casa. Marte no vino pero encontré sustituto: un buen libro. Pequeñito, no tenía más de 150 páginas, pero muy bueno. Con él he descubierto que es posible que me guste leer teatro, cosa que hasta esta mañana me aburría. Qué poco hace falta para cambiar de opinión, ¿verdad?
No he necesitado la televisión, el ordenador o el mp4. No he necesitado tener a nadie cerca. Esta tarde ha sido para mi, ya sabéis, soy bastante independiente y como tal de vez en cuando necesito una dosis de tardes autistas que me ayuden a pensar, a estar tranquila y a evadirme por unas horas del mundo. Por eso, se puede decir que hoy he estado en Marte y no he necesitado nada, absolutamente nada excepto a mi.
Aquí os dejo un pequeño fragmento de Salvajes:
"¡Dios mío! ¡Cómo está esto también! No os han tratado muy bien mientras yo no estaba, ¿verdad?
¡Madre mía, qué desastre! (Se acerca a ellos y se pone a arreglarlos lo mejor que puede.) Qué trabajo les hubiera costado echaros un poco de agua de vez en cuando… Mira que se lo dije… Necesitáis tan poco para vivir… Si la gente no es capaz de regar una planta, qué podemos esperar de este mundo… (Coge un tiesto donde aún hay parte de un geranio con vida.) Tú has resistido a todo, como yo… Medio seco, negro por dentro por la contaminación y la suciedad, apagado y sin energía… Pero ¡vivo! Deberías haber nacido en un buen invernadero y no en un barrio como éste… (Tira a la basura otras ramas de geranios secos) Ya estoy aquí yo, para regaros, y cuidaros, y hablaros, que es lo que más necesitáis para vivir, como todo el mundo: cariño."
J.L.Alonso de Santos.
Hoy no tenía ganas, preferí quedarme en casa. Marte no vino pero encontré sustituto: un buen libro. Pequeñito, no tenía más de 150 páginas, pero muy bueno. Con él he descubierto que es posible que me guste leer teatro, cosa que hasta esta mañana me aburría. Qué poco hace falta para cambiar de opinión, ¿verdad?
No he necesitado la televisión, el ordenador o el mp4. No he necesitado tener a nadie cerca. Esta tarde ha sido para mi, ya sabéis, soy bastante independiente y como tal de vez en cuando necesito una dosis de tardes autistas que me ayuden a pensar, a estar tranquila y a evadirme por unas horas del mundo. Por eso, se puede decir que hoy he estado en Marte y no he necesitado nada, absolutamente nada excepto a mi.Aquí os dejo un pequeño fragmento de Salvajes:
"¡Dios mío! ¡Cómo está esto también! No os han tratado muy bien mientras yo no estaba, ¿verdad?
¡Madre mía, qué desastre! (Se acerca a ellos y se pone a arreglarlos lo mejor que puede.) Qué trabajo les hubiera costado echaros un poco de agua de vez en cuando… Mira que se lo dije… Necesitáis tan poco para vivir… Si la gente no es capaz de regar una planta, qué podemos esperar de este mundo… (Coge un tiesto donde aún hay parte de un geranio con vida.) Tú has resistido a todo, como yo… Medio seco, negro por dentro por la contaminación y la suciedad, apagado y sin energía… Pero ¡vivo! Deberías haber nacido en un buen invernadero y no en un barrio como éste… (Tira a la basura otras ramas de geranios secos) Ya estoy aquí yo, para regaros, y cuidaros, y hablaros, que es lo que más necesitáis para vivir, como todo el mundo: cariño."
J.L.Alonso de Santos.
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